"Por regla general, las sociedades humanas 
no son innovadoras, sino más bien jerárquicas y ritualistas. Cualquier 
sugerencia de cambio se acoge con recelo, ya que implica la incómoda 
transformación futura del ritual y la jerarquía imperantes, es decir, la
 sustitución de una serie de rituales por otra o, tal vez, por una 
sociedad menos estructurada y regida por un número inferior de rituales.
 Sin embargo, llega un momento en que es preciso que las sociedades 
cambien. «Los dogmas de un pasado tranquilo son insuficientes para un 
presente tumultuoso», aseveró Abraham Lincoln. Buena parte de las 
dificultades que surgen al intentar reestructurar las sociedades 
norteamericanas y de otros pueblos arrancan de la resistencia que oponen
 los grupos que tienen intereses creados en el statu quo. Es probable 
que una transformación profunda de la sociedad obligue a los que ocupan 
el pináculo de la jerarquía a descender muchos peldaños, lo cual les 
irrita y les mueve a ofrecer resistencia." 
                                                                                         Carl Sagan, 
Los dragones del Edén