¿Era mucho pedir que dos de mis superhéroes favoritos no cayeran en manos de las pseudociencias? Parece que sí. Y es que todo personaje ficticio obviamente debe su intelecto al escritor que le da vida: en la literatura universal, Maigret, Poirot, Dupin y Holmes, tenían a
Georges
Simenon, Agatha Christie, Edgar Allan Poe y Arthur C. Doyle; en el mundo
de los cómics, Batman y Ironman tenían a Bob Kane y Stan Lee. Al morir o ser reemplazados los creadores originales, es común que Hollywood recurra a guionistas generalmente menos conocedores de ciencia para que tomen su lugar y sí, a veces buscan hacer más vistosos a sus personajes haciéndolos usar pócimas o pseudomedicinas para, a último momento y de forma milagrosa (sí, sería un milagro que funcionen), curarse de sus heridas y salvar el día.
Batman y el jugo de clorofila
Bruce Wayne y su desayuno verde |
En
Batman Inicia,
vemos a Bruce Wayne, considerado por los fans como el mejor detective del mundo, tomándose de un solo trago un gran vaso de un extraño jugo verde que le trajo Alfred. A menos que sea jugo de acelga, todo parece indicar que se trata de jugo de pasto, ese supuesto elixir oxigenante que se comercializa como suplemento dietario o terapia contra varias enfermedades. Quienes lo promocionan incluso dicen que previene el cáncer. Parece que Bruce cree que tomarse eso antes de sus ejercicios
físicos matinales lo ayudará a sacar más músculos o reponerse más rápido de los golpes de la noche anterior.
Pero resulta que el "wheatgrass" no es más que otro timo. Se lo
promociona como un producto natural a base de clorofila, que concentra
la energía del Sol y ayuda a generar glóbulos rojos por ser casi
idéntica a la hemoglobina. Entre sus propiedades, se dice que oxigena el
organismo, rejuvenece los tejidos, limpia el cuerpo de sustancias
tóxicas, etc. La realidad es que nada de esto es cierto. Este jugo de
brotes de trigo, rico en clorofila, sólo es un jugo bastante feo que a
lo sumo puede ayudarte a ir al baño. Bueno, a lo mejor Bruce estaba un
poco estreñido.
Una de las empresas que comercializa el jugo de pasto |
Ironman y la acupuntura
Otra
de las grandes mentes científicas en la lucha contra el mal es la de
Tony Stark, alias Ironman. Sin embargo, el hombre del traje de hierro no
sólo aparece en su primera película tomando un jugo verde muy parecido
al del encapotado, sino que hacia el final de la tercera lo vemos en una
sala de operaciones con múltiples agujas largas clavadas en su torso. Esto
llama la atención porque la acupuntura carece del soporte científico que Stark apreciaría. Basada en la supuesta existencia de una especie de energía vital, llamada Qí (chí) en la
tradición china, esta técnica afirma ser capaz de aliviar dolores y
curar enfermedades y padecimientos de lo más variados con sólo clavar
agujas en sitios específicos del cuerpo. Esto, dicen sus practicantes,
restaura o da un balance a esta energía misteriosa que nadie ha logrado
identificar ni mucho menos cuantificar. Al menos, Tony no tenía puesto su
“traje” cuando le clavaban las agujas.
Ironman y las agujas |
Ninguno de estos detalles me impidió disfrutar como un niño ambas trilogías, pero sería bueno que el cine se cuidara un poco más de dar publicidad a estas falsas terapias.
Probaste tu mismo alguna vez un tratamiento de acupuntura, realizado por un experto, para saber si funciona o no?
ResponderEliminarHola, Confucio! Claro que no lo probé. Una, porque por suerte no padezco nada que deba curarse. Dos, si así fuera recurriría a médicos, que para eso han estudiado y que realizan prácticas que pueden comprobarse y que se basan en el método científico. Saludos!
EliminarNo lo probaste tu mismo pero difundes opiniones sobre el tema
ResponderEliminar//si así fuera recurriría a médicos, que para eso han estudiado y que realizan prácticas que pueden comprobarse y que se basan en el método científico.//
El metodo cientifico si? Y tu que entinedes de todo eso para emitir opinion de que eso funciona y de que entre otras cosas no arruina tu salud de otra manera a corto o largo plazo?