miércoles, 30 de mayo de 2012

El Sexto Sol (?)

Hace pocos días me llegó el siguiente mail del Centro para Actividades Andares:


Primero intenté marcar las incoherencias y charlatanerías que contiene el texto, pero me quedó todo marcado, así que voy a ir por partes (sí, hoy estoy masoquista):
  • "Se inicia un nuevo año solar": un año solar es una vuelta de la Tierra alrededor del Sol y dura unos 365 días y monedas. No hay más que eso.No se inicia el año solar cada vez que a alguien se le ocurre que viene una nueva "era" o algo así.
  • "el sexto sol": sólo hay un sol en nuestro Sistema Solar. Si han descubierto otro, no me enteré.
  • "el sol de los hombres de las altas vibraciones": esto de las vibraciones me recuerda a la charla sobre las terapias akáshicas, donde se mencionaban las ondas Schumann, pero no sé si tendrá alguna relación. Por otro lado, no sé cómo un sol puede ser de un tipo de hombres y no de otros.
  • "Vamos hacia él": ¿cómo hacemos para ir hacia el Sol? ¿Alguien tiene una nave espacial? ¿No nos vamos a quemar cuando estemos cerca? Bueno, ok, es probable que lo del "sol" sea metafórico, pero no lo dice. Quizás sean las "dimensiones" que mencionaba Silvia Simondini en el Museo Ovni, cuando decía que "la Tierra está entrando en la cuarta dimensión y que luego vendrá la quinta y así sucesivamente". Sea como sea, son charlatanerías en estado puro.
  • "para un cambio en la concepción de la vida y el mundo": para cambiar nuestra concepción de algo, no creo que haga falta ir hacia el Sol.Las pseudociencias siempre proponen que cambiemos nuestra forma de ver todo, porque si lo vemos desde un punto de vista lógico y racional, no tienen ningún sentido.
  • "Los antiguos pueblos americanos concebían al tiempo como algo cíclico": sí, puede ser, pero, ¿y? Algunas civilizaciones antiguas, no sólo americanas, imaginaron en principio al tiempo como algo cíclico porque eso les parecía lo más lógico al ver que los días seguían a las noches y las estaciones se sucedían unas a otras año tras año. Pero esto no significa que así debamos entenderlo nosotros hoy. Babilonios, griegos, judíos y cristianos -en ese orden- cambiaron esa concepción por la del tiempo lineal. Hoy sabemos que, al menos en este universo -y mientras no nos trague un agujero negro-, el tiempo es lineal, continuo e infinito.
  • "Una era tras otra se sucedían en un continuom de destrucción y creación, de muerte y renacimiento": la palabra correcta en latín es continuum. En cuanto a la frase en sí, si entendemos creación como la obra de un creador y renacimiento como reencarnación, obviamente está lejos de ser cierta. Si el sentido es sólo metafórico, tampoco necesariamente es así , ya que las eras son simplemente períodos de tiempo arbitrariamente definido, cuya duración es variable según su uso (geología, historia, etc).
  • "Estos ciclos también pueden y deben darse en nosotros": volvemos a lo mismo, si los antiguos lo creían, debe ser cierto y debe ser bueno. ¡Error! Además, ¿a qué se refiere con que los ciclos deben darse en nosotros? Nacemos, vivimos y morimos, pero eso no es un ciclo, a menos, como decía, que se refiera a la reencarnación.
  • "Según esta concepción estamos entrando en el sexto sol": ¿qué es eso de que estamos entrando en un sol? ¿Cómo podemos estar entrando en un sol?
  • "en un proceso de renovación, no de conclusión, en un proceso de mejora": aquí es donde apelan al miedo a la muerte, prometiendo que la cosa no termina, que hay un después, que seremos eternamente felices.
  • "Es un camino hacia una mejor actitud y, en consecuencia, a una mejor calidad de vida": no veo la relación entre creer que vamos hacia un sol inexistente y la mejor actitud y calidad de vida. O sea, ¡si vamos hacia un sol, va a hacer calor! ¡Mucho calor! La gente se pone insoportable cuando está acalorada. Chistes aparte, una mejor actitud no siempre conduce a mejorar la calidad de vida, y creer estas charlatanerías ciertamente tampoco.
  • "Con estos encuentros pretendemos encontrar las herramientas que nos permitan romper las cadenas de nuestra historia familiar, personal y cultural a fin de lograr un renacimiento interior que nos permita ir hacia el sexto sol": aparentemente, la idea es desligarnos de nuestras familias, nuestros seres queridos, nuestros afectos, nuestra cultura, nuestros conocimientos, y entregarnos a una especie de gurú que nos promete lo que queramos oír a cambio de nuestra fidelidad y compromiso. ¿No les suena a secta?
La imagen del mail viene acompañada de estas lineas (copiado textualmente):
"DICIEMBRE de 2012: EL SEXTO SOL inicia un enorme cambio en nosotros a nivel de todo el planeta, es el momento o era de la humanidad en el cual un nuevo maestro espiritual emerge."

"Segun las profecías mayas el 22/12/2012 el sol recibirá un rayo incronizador, iniciando un nuevo ciclo galáctico, el sexto sol, que en la humanidad se traducirá en el fin del mundo de materialismo y destrucción para pasar a una etapa de respeto y armonía, ya que nada escapa al cosmos, ni siquiera el majestuoso y omnipotente ser humano. Ese CAMBIO ya estaba anunciado y hoy el Dr Berlanda brindará las herramientas para romper las ataduras que nos ligaban a los antiguos paradigmas que albergan en el quinto sol."
  • "es el momento o era de la humanidad en el cual un nuevo maestro espiritual emerge": Volvemos a lo de las eras. ¿Un nuevo maestro espiritual emerge? ¿Será algo así como un gurú, un profeta o un mesías? Porque me suena a eso...
  • "Segun las profecías mayas": ¿y desde cuándo creemos en las profecías mayas? Cada vez que un pseudocientífico o alguien que pretende poder ver el futuro quieren predecir algo, recurren al verso de que alguien más ya lo había predicho, pero ese alguien debe haber muerto hace mucho y, en lo posible, pertenecer a alguna cultura de la que la gente mucho no sepa. ¿Porqué deberíamos suponer que los mayas podían predecir el futuro? ¿En qué se basan para esa afirmación tan habitual?
  • "el 22/12/2012 el sol recibirá un rayo incronizador": ¿Qué es un rayo incronizador? Es probable que sea un error y se refieran a un rayo sincronizador, pero eso tampoco nos da muchas respuestas, ya que seguimos sin saber qué es, qué hace, de dónde va a venir y, quizás más importante, cómo lo saben. Otra: ¿qué van a decir el 1º de enero de 2013, cuando no haya pasado nada de esto?
  • "iniciando un nuevo ciclo galáctico, el sexto sol": ¿Se supone que nos están diciendo que el sexto sol es un nuevo ciclo galáctico? ¿Nos toman por tarados? ¡Un sol es un sol y una galaxia es una galaxia! ¡No son mismo!
  • "que en la humanidad se traducirá en el fin del mundo de materialismo y destrucción para pasar a una etapa de respeto y armonía": ¿Este supuesto nuevo ciclo va a implicar un cambio en todas las personas del planeta, transformándolas de materialistas (díganselo a los que no tienen un peso) y destructores (díganselo a los que nunca destruyeron nada) en respetuosos y armoniosos? ¿Qué van a decir cuando nada de todo esto suceda, cuando siga todo igual? ¿Darán otra charla para explicar que viene otro gran cambio?
  • "Nada escapa al cosmos, ni siquiera el majestuoso y omnipotente ser humano"? ¿Qué entienden por cosmos? ¿Cómo se podría escapar del cosmos? Supongo que quiere decir que ni el hombre con toda su soberbia puede escapar del destino o de la naturaleza o la Pacha Mama o algo así. Bienvenidos a la New Age: mil palabras para decir nada y hacerse unos pesos a costa de la credulidad de la gente.
  • "Ese CAMBIO ya estaba anunciado": no vi el cartel. Siempre dicen lo mismo. Volvemos a lo que decía más arriba sobre las profecías.
  • "hoy el Dr Berlanda brindará las herramientas  para romper las ataduras que nos ligaban a los antiguos paradigmas que albergan en el quinto sol": de nuevo, nos sugieren desligarnos de los antiguos paradigmas, que no es más que otra forma de decir que dejemos de pensar racionalmente y de preguntar tanto y nos limitemos a creer sumisamente cuanta perorata nos lancen desde el micrófono. ¿Los paradigmas que albergan en el quinto sol? ¿A quién albergan? A la ignorancia, supongo. Y no parece que en el sexto sol la cosa mejore mucho...

Judaísmo ateo: ¿una contradicción?


Kipá y Menorá
En el judaísmo, como en la mayoría de las culturas y religiones, hay una amplia escala en cuanto a la práctica del culto. En orden creciente de religiosidad se podría hacer, a grandes rasgos, la siguiente clasificación:
  • culturales
  • creyentes
  • ortodoxos
  • ultra ortodoxos
Los judíos culturales, o laicos, no son realmente creyentes, la religión casi no influye en sus vidas ni juega un papel preponderante en sus decisiones cotidianas. Una familia de este tipo casi no se diferencia de una directamente no judía, salvo por cuestiones culturales, la conservación de ciertas tradiciones y un sentido de pertenencia al pueblo de Israel. Es muy común en el judaísmo que estos factores (que constituyen la cultura judía) sean más importantes que la religión en sí. Es por esto que la expresión judaísmo ateo o secular no es necesariamente una contradicción, incluso hay instituciones dedicadas a su difusión y fomento.

Los que en esta pequeña clasificación llamo creyentes son aquellos que, si bien creen en Dios y en buena parte de los textos religiosos, no van todos los días a los templos (sólo para a las ceremonias religiosas/culturales más importantes) ni respetan al pie de la letra la mayoría de las normas religiosas, limitándose tan sólo a algunas de las relativas a la alimentación, como no comer cerdo o no mezclar carnes con lácteos. Serían algo similar a los que son católicos pero que casi nunca van a misa ni se la pasan leyendo la Biblia cada noche o rezando antes de cada comida.

Rabino ortodoxo moderno
Llamo judíos ortodoxos a los que son creyentes y viven su vida en base a la religión, haciendo todo lo posible por seguir las 613 normas de la vida religiosa (mitzvot). Esto generalmente no implica que estas personas intenten vivir aisladas de las sociedades en las que se encuentren, sino que forman parte integral de las mismas. Cuán ortodoxa pueda llegar a ser la vida de una familia, o de una comunidad, dependerá en gran medida de las condiciones que le brinde el medio en que vivan: si hay templos y escuelas que sigan esa corriente religiosa, comercios donde puedan comprar comida preparada según las normas Casher, entre otros factores. En muchas ciudades del mundo, el judaísmo ortodoxo ha encontrado las condiciones necesarias para establecerse y ha llegado a formar, incluso, grandes "barrios ortodoxos".

Rabinos jasídicos
Los religiosos ultra ortodoxos son la rama más conservadora del judaísmo. No sólo se diferencian por respetar todas las mitzvot a rajatabla, sino también porque en algunos casos, dependiendo del grado de conservadurismo de sus rabinos, viven casi como hace 200 años, casi completamente aislados del resto de la sociedad y del mundo, dedicados sola y únicamente a su religión. Los menonitas, huteritas y amish son algunos ejemplos de esta forma de vida dentro del cristianismo. Una de las muchas características de estas comunidades casi cerradas es que no aceptan la justicia civil de las sociedades en las que se encuentran. Los conflictos, desde los más nimios hasta los más importantes, son dirimidos dentro de la comunidad, sin recurrir a la policía ni a los tribunales civiles. En los casos donde las partes no llegan a un acuerdo, se recurre a la guía y consejo de los rabinos, que cumplen el rol de jueces, mediadores y consejeros, siguiendo la Halajá, que es la recopilación de las principales leyes judías, que incluyen a las mitzvot, y las leyes talmúdicas y rabínicas, así como sus tradiciones y costumbres. Por ejemplo, es común que los matrimonios sean preacordados, pero en caso de que los contrayentes no estén de acuerdo, se recurre al rabino para que les permita no casarse. También le piden permiso los matrimonios que se quieren separar, personas que acusan a otras de haberles robado, etcétera. El judaísmo ultra ortodoxo no es tan común, pero en algunas ciudades donde encontró las condiciones necesarias, ha echado raíces.

miércoles, 23 de mayo de 2012

La propuesta de un pastor evangélico


El pastor evangélico Charles Worley, de la Iglesia Bautista de Providence Road, Maiden, Estado de Carolina del Norte, EEUU, propone -y lamentablemente no es el primero en decir en voz alta esta imbecilidad- construir una gran cerca eléctrica y meter a todos los homosexuales del otro lado (y tirarles comida desde un avión, no vaya a ser que se contamine al dárselas en la mano) para que después de unos años no quede ninguno "porque no pueden reproducirse". Parece una propuesta salida de una película de zombies, más que de un pastor evangélico. Aclara, por si hiciera falta, que su propuesta nunca va poder ser aprobada por el Congreso de los Estados Unidos, ¡lo cual, por supuesto, le indigna! Por estas cosas es que es tan importante que los Estados sean laicos. 
 
Lo más lamentable al escucharlas es darse cuenta de que realmente hay gente que las piensa y las propone frente a un micrófono. Porque lo que este "pastor" propone es ni más ni menos que un campo de concentración. Exterminar a un grupo de personas (por que, si por él fuera, ni se gastaría en "tirarles" comida) cuyo único delito (delito sólo para él y los demás fanáticos) es tener una sexualidad distinta de la suya. Son personas como Charles Worley los que deberían ser encerrados y no poder reproducirse. Amén.

 

Esta es una traducción mía de su discurso, lleno del amor al prójimo que siempre ha caracterizado a este tipo de religiones:

"-Nuestro Presidente, diciendo que está bien que dos mujeres se casen, o que dos hombres se casen, les digo ahora mismo, esto me decepcionó mucho, les aseguro, no hay nada más triste.
La Biblia está en contra de esto, Dios está en contra de esto, yo estoy en contra de esto, y, si tienen algo de sentido común, ¡ustedes están en contra de esto!
Yo tengo un modo, se me ocurrió una forma de librarnos de todas las lesbianas y los amanerados, pero no podría lograr que se apruebe en el Congreso.
Construyan una gran cerca. Cincuenta o cien millas de largo. Pongan a todas las lesbianas ahí dentro. Vuelen por encima y tiren algo de comida. Hagan lo mismo con los amanerados y homosexuales. Y electrifiquen la cerca para que no puedan salir. Y saben qué, en unos pocos años no va a quedar ninguno.
Saben porqué? No se pueden reproducir.
Si un hombre alguna vez tiene un hijo, alaben a Dios porque será el primero.
Les digo ahora mismo, alguien me pregunta '¿Por quién vas a votar?'
No voy a votar por un asesino de bebés y amante de los homosexuales!"

martes, 22 de mayo de 2012

Algunas de las cosas que la astrología no tiene en cuenta


Astrónomos estudiando un eclipse (A. Caron)
Anteriormente, habíamos hablado sobre cómo las constelaciones sólo son tales si las observamos desde la perspectiva única de nuestro planeta y cómo, si pudiéramos alejarnos unos pocos años luz hacia cualquier dirección, nos daríamos cuenta de que las estrellas que parecían estar cerca unas de otras, en realidad están a distancias enormes entre sí. Por este motivo, las formas que les asignaron los seres humanos al estudiar el cielo hace cientos de años, dejan de tener cualquier sentido real, para ser sólo poético o subjetivo. Es decir, el hecho de que veamos desde aquí un grupo de estrellas que se asemejen (con mucha imaginación) a un león y lo llamemos constelación de Leo, no significa absolutamente nada porque, al alejarnos, ese león desaparece (o, mejor dicho, nunca existió). Hacer cualquier referencia a esa figura imaginaria en relación al carácter de las personas nacidas en la Tierra cuando ese grupo de estrellas estaba en una determinada posición en el cielo (asegurar que esas personas serán, por ejemplo, dominantes, feroces o, no sé, ¿carnívoras?), es simplemente ridículo.

Pero esta no es la única crítica que se le puede hacer a la astrología. En realidad, se le pueden hacer muchísimas. Para empezar, la astrología sólo utiliza a las constelaciones zodiacales, aquellas que se encuentran en la franja del cielo por la cual aparentan desplazarse el Sol, la Luna y los planetas. A todas las demás constelaciones, decenas de ellas, no les presta ninguna atención.

Otra cuestión importante es que, dado que la astrología se basa en la aseveración de que la posición de los objetos celestes al momento de nuestro nacimiento tiene influencia sobre nuestra personalidad y nuestro destino, debería tener en cuenta a todos esos objetos. Sin embargo, los astrólogos basan toda su pseudociencia en la supuesta interacción (jamás encontrada, explicada ni demostrada) entre los planetas del Sistema Solar y las estrellas visibles desde la Tierra. A veces incluyen algún que otro cometa o asteroide. Pero en el Universo hay muchísimos otros cuerpos que no son considerados en la astrología, ya que no eran conocidos cuando ésta fue desarrollada.

No son tenidas en cuenta las lunas, satélites naturales girando alrededor de varios de los planetas de nuestro Sistema Solar y seguramente de millones de otros planetas fuera del mismo y que, ya que estamos, tampoco son considerados. Tampoco incluyen en sus “cálculos” a los asteroides, que son pequeños cuerpos girando alrededor del Sol, millones de los cuales se encuentran formando un vasto cinturón entre la órbita de Marte y la de Júpiter. Quizás crean que son muy pequeños, pero algunos tienen unos cuantos cientos de kilómetros de diámetro y se los denomina planetas menores, o planetoides. Otro cinturón similar se encuentra más allá de Neptuno (cinturón de Kuiper) y hay también asteroides llamados troyanos, que comparten la órbita con algún planeta, siguiéndolo en su recorrido elíptico alrededor del Sol. Por otro lado, habría que preguntar a algún astrólogo cómo influirá en nosotros el hecho de que Plutón ya no sea considerado un planeta, sino un planeta enano, de los cuales hay al menos cinco.

Las estrellas, por su parte, son tomadas como si fueran todas iguales cuando, en realidad, son todas distintas. Algunas están a punto de explotar, otras acaban de formarse; algunas son relativamente pequeñas, otras son miles de veces más grandes que el Sol; su masa, composición, temperatura y brillo, por citar algunas características, varían enormemente, dando origen a su clasificación astronómica.

Comparación de tamaño de algunos objetos celestes
En este video se pueden observar las enormes diferencias de tamaño entre los planetas del Sistema Solar y el Sol y algunas otras estrellas de tamaños conocidos. Ahora, si sus tamaños resultan asombrosos, las distancias entre estos cuerpos son directamente imposibles de imaginar. Viajando desde el Sol a la velocidad de la luz (un poco más de mil millones de kilómetros por hora), demoraríamos más de cuatro horas para llegar a Neptuno. Si quisiéramos viajar a la estrella Sirio, la estrella más brillantes del cielo, perteneciente a la constelación del Can Mayor, tardaríamos ocho años y medio. Y Sirio está relativamente cerca nuestro. Para llegar a la estrella Espiga, en la constelación de Virgo, necesitaríamos algo más de 260 años. Alcanzar el centro de nuestra galaxia, la Vía Láctea, nos llevaría 27.700 años. Sí, aún estamos en el barrio. Llegar a otra galaxia, como por ejemplo Andrómeda, implicaría viajar casi tres millones de años. Esto es lo que ni los astrólogos ni los seguidores de la astrología terminan de entender: no hay forma de que alguna energía mágica llegue desde esos cuerpos tan distantes hasta nosotros y mucho menos que esto pueda influir en nuestro carácter, comportamiento y destino. Aún más ridícula es la idea de que esto tenga relación con la posición aparente de estos objetos en el momento en que nacimos.

lunes, 21 de mayo de 2012

Sobre el bautismo

Cuando hablamos sobre el mitraísmo y el origen del cristianismo como religión oficial de Roma en la época de Constantino, vimos también algo sobre el origen del ritual del bautismo. Ahora nos preguntamos por qué se sigue realizando y qué significado tiene hoy este rito tan antiguo, que servía para consagrar a las personas, especialmente los soldados, a Dios. (Sacramentum, ya que estamos, equivale gramaticalmente a 'instrumento para hacer santo' y era el término con el cual se designaba al juramento que hacían los soldados romanos de servicio incondicional al ejército.)

Bautismo de un bebé
El bautismo es, efectivamente, uno de los rituales, o sacramentos, más importantes en la religión católica; posiblemente sea el más importante. Se pueden bautizar personas de cualquier edad, desde bebés hasta adultos, e incluso personas que desean adoptar la fe católica porque están a punto de morir y temen no ser bien recibidos por Dios si no lo hacen. Los padres hacen bautizar a sus hijos recién nacidos con el objetivo de asegurarle al de arriba que el niño le pertenece y, para que se quede tranquilo, comprometerse a hacer cuanto esté a su alcance para educarlo en la fe católica. Esto, claro, con la esperanza de que a cambio le reserve un lugarcito en el Cielo. Algo así como sobornar a la directora del jardín de infantes para que le guarde un lugar en la salita. Cabe preguntarse, si uno cree en el Dios cristiano compasivo y misericordioso, si es posible que éste deje afuera a una persona tan sólo porque no fue bautizada y a lo largo de su vida nunca se ocupó de realizar este sacramento. Si Dios conoce nuestros corazones y sabe todo lo que pensamos, ¿no sabe si creemos o no en Él y si hemos sido buenos cristianos, sin necesidad de que haya habido un bautismo?

Bautismo por inmersión
Durante el ritual, el sacerdote recita las palabras del bautismo (el rito en sí), al mismo tiempo que moja tres veces al bautizado con agua -que representa la purificación-, ya sea por inmersión (en una pileta, o en la playa de un río o lago), o por ablución (mojarlo como si se estuviera lavando) o aspersión (salpicarlo), y luego le realiza la señal de la cruz en la frente. Para los bebés, es común que sólo se le moje un poco la cabeza. Tampoco es necesario llevar a cabo el bautismo apenas el niño nace, sino que pueden dejarse pasar los días que haga falta según aconseje el pediatra. Dependiendo del sacerdote o la corriente religiosa a la que pertenezca, puede hacerse en una iglesia o al aire libre, puede celebrarse una misa o leerse algunos versículos de la Biblia, algunos parientes pueden ser invitados a decir unas palabras, puede haber un coro, etcétera.

La cuestión es lo que viene después del bautismo. Éste, como dijimos, es un compromiso que los padres toman -con Dios, con la familia, con el cura y con la comunidad- por el cual se obligan a educar al niño como católico. Esto es lo que me resulta chocante, porque se trata, ni más ni menos, que de quitarle al niño la posibilidad y la libertad de decidir, cuando sea mayor, en qué querrá creer o qué religión (o ninguna) preferirá profesar. Básicamente, se lo condiciona a ser católico. (Por supuesto, para muchas familias el bautismo es tan sólo una costumbre que se lleva a cabo desde hace generaciones, y que no implica un condicionamiento posterior para el niño, pero no me refiero a ellas.)

Resulta obvio que los padres hacen esto con las mejores intenciones y con todo el amor del mundo, pensando tan sólo en el bienestar de sus hijos (y de su alma inmortal, ya que en eso creen). Pero hacer algo con amor y buenas intenciones no necesariamente significa que sea correcto. ¿Está bien enseñarle a nuestros hijos, cuando éstos aún no tienen edad para cuestionarse la veracidad de lo que les enseñamos, que existe un ser imaginario del cual no hay evidencia alguna, y en cuya supuesta existencia se basa todo un sistema de creencias que condicionará en gran parte su vida? Para mí, salvando las distancias entre religión y gustos deportivos, es lo mismo que cuando un chico cree que un determinado equipo de fútbol es el mejor simplemente porque es lo que cree su papá. El análisis y el pensamiento crítico quedan entonces relegados.

Esto nos lleva, una vez más, a preguntarnos qué pasa con todas aquellas personas no bautizadas porque nacieron en países, culturas o familias que profesan otros credos, o ninguno. Si uno nace en una familia judía, musulmana o atea, no será bautizado y seguramente tampoco será católico. ¿Qué pasa con esa gente? Obviamente, nada. A nadie le pasa nada malo por el solo hecho de no haber sido bautizado. Viven su vida como todo el mundo. Por lo tanto, ¿qué puede pasar (de malo) si uno no bautiza a su hijo? De nuevo, nada (con la salvedad de que, particularmente durante la edad escolar, los demás niños quizás los miren como sapos de otro pozo, y los hagan objeto de burlas e incluso acoso, pero aquí la responsabilidad es de la escuela, que debe evitar la discriminación, enseñando que la diversidad no tiene nada de malo y que hay personas que creen cosas distintas, o nada). Crecerá observando el mundo que lo rodea con curiosidad y decidirá a su debido tiempo en qué desea creer. La diferencia es que, al bautizarlo, uno toma un compromiso, o así lo sienten muchas personas. Ese compromiso, junto con el hecho de asentar el nombre del niño en los registros de personas bautizadas, es el verdadero objetivo del bautismo, porque en ello reside el poder de la Iglesia Católica: no en Dios, sino en la cantidad de fieles.

Tristes Testigos transfusionados - El punto de vista legal

True Blood
¿Porqué los Testigos de Jehová se niegan a recibir transfusiones de sangre? Fernando Saraví (médico, profesor de Biofísica de la Carrera de Obstetricia en la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Cuyo y evangélico experto en teología cristiana) nos aclara esta cuestión en su libro Falso Testimonio, citado en este artículo de Factor 302.4. Resulta que los Testigos se toman la Biblia un poco demasiado literalmente.
"Un ejemplo clásico de literalismo de los Testigos de Jehová es el rechazo de las transfusiones de sangre, aun a riesgo de sus propias vidas a las de sus hijos. Se basa en textos como Levítico 17:10-12, donde según la Traducción del Nuevo Mundo se dice que 'el alma de la carne está en la sangre'."
Así es que la prohibición de ingerir sangre deriva de la noción de que en ella se encuentra el alma, la vida.
"Se prohibe tomar la sangre porque la vida está en la sangre, si al hombre se le permite comer carne, es a condición de que respete la sangre –asiento de la vida -, bien derramándola en homenaje al Creador, o dejándola derramarse en tierra."
Esto cambió en el Nuevo Testamento, donde se eliminó esta prohibición, salvo en los casos de idolatría o rituales paganos. Saraví sostiene que, incluso en el contexto religioso, la negación a recibir transfusiones de sangre no tiene sentido, ya que "no hay ingestión, digestión, ni víctima, sino que la sangre proviene de uno que dona voluntariamente, y es incorporada directamente al torrente sanguíneo del receptor". Pero para los Testigos, esta diferencia no cambia nada. No van a aceptar una transfusión.

Para saber qué dice la ley argentina sobre este dilema, recurrí a un juez provincial, que me lo aclaró en una pequeña entrevista.

En primer lugar, no importa el motivo que dé el paciente para negarse a recibir un tratamiento. No necesita un motivo válido. Es más, ni siquiera necesita dar un motivo. Sólo necesita demostrar que es un adulto en pleno uso de sus facultades mentales (aunque, personalmente, coincido con Alerta Religión en que una persona que prefiere morir -o dejar morir a un ser querido- antes que recibir una transfusión porque así lo dice su librito de cabecera, no es mentalmente competente).

Aquí es donde al médico se le presenta el problema. Si no hace nada y deja a su paciente sin tratamiento, puede ser considerado por la Justicia como abandono de persona si alguien decide demandarlo. Si, por el contrario, lleva a cabo la transfusión de todas formas, puede ser demandado por el paciente, una vez que se cure. Así que la única opción que le queda es recurrir a los Tribunales y solicitar a un juez una orden para hacer la transfusión a pesar de la negativa del paciente. (No es raro que un Testigo accidentado sea llevado a la guardia de un hospital a altas horas de la madrugada y los médicos deban buscar un juez de turno).

Si el paciente es un adulto con pleno uso de sus facultades, el juez, casi con seguridad, fallará a su favor, por entender que las personas tienen derecho a decidir sobre su propio cuerpo. Lo mismo exactamente ocurrirá si el paciente está inconsciente pero dejó su voluntad por escrito en un documento validado por un escribano. En Argentina, la eutanasia está prohibida, pero la Justicia entiende que no realizar una transfusión no se considera una práctica eutanásica, sino un respeto a la voluntad del paciente.

Ahora, los casos en los que el juez casi con seguridad autorizará al médico a hacer lo mejor para la salud del paciente, sin importar lo que digan éste o su familia, son: si el paciente está inconsciente y no hay un documento válido que diga que no desea recibir una transfusión (la sola palabra de un familiar o conocido no sirve); si es menor de edad o una mujer embarazada con recomendación médica expresa de transfusión, ya que los menores están protegidos por la Convención de los Derechos del Niño, y la decisión del juez tiene mayor peso que la de sus padres o tutores. 

jueves, 17 de mayo de 2012

Sobre la reciente Ley de Muerte Digna

Sobre la Ley de Muerte Digna
El tema de la necesidad de una ley de muerte digna resurgió en Argentina a raíz del caso de Camila Sánchez, una beba que nació muerta el 27 de abril de 2009 a causa de una mala praxis. Los médicos la reanimaron, pero ya era tarde. Camila respira y se alimenta de manera artificial, no se mueve, ninguno de sus sentidos funciona y no tiene conciencia. Desde entonces, sus padres reclaman una ley que permita a su hija morir con dignidad, en lugar de seguir indefinidamente conectada a máquinas y tubos, como hace ya tres años, sin ninguna esperanza de que su estado cambie.

Hace pocos días, y después de varias idas y vueltas y la presentación de muchos proyectos (recomiendo leer sobre este debate en Alerta Religión), se aprobó esta esperada ley que reconoce el derecho de los pacientes a:
  • decidir si desean aceptar o rechazar los tratamientos, 
  • dejar directivas anticipadas sobre su salud a través de una declaración de voluntad,
  • estar correctamente informados de su real estado de salud, los tratamientos posibles y sus consecuencias,
  • rechazar la hidratación o alimentación cuando esto tan sólo sirva para prolongar un estadio terminal irreversible o incurable. 
Esto, cabe aclarar, no significa dejar de controlar la salud del paciente, ni interrumpir los tratamientos destinados a aliviar el sufrimiento, ni es tampoco una ley sobre eutanasia, que sigue sin ser legal en Argentina.

La Iglesia Católica ha estado siempre en contra de este tipo de leyes que nos hacen creer que podemos decidir sobre nuestros propios cuerpos. Varios de los palos puestos en la rueda para la sanción de esta ley fueron puestos por algunos de sus representantes, como Cinthia Hotton, una evangélica pentecostal fundamentalista, Liliana Negre de Alonso, una ultracatólica miembro del Opus Dei, el Opus Dei mismo, a través de sus dependencias y organizaciones pertenecientes a la Iglesia. Así que, a primera vista, podría parecer interesante que la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) en su comunicado del 16-05-2012 diga:
"En la llamada ley de Muerte Digna creemos que se ha avanzado en aspectos referidos a la proporcionalidad de los medios a utilizar en enfermos terminales, que eviten un encarnizamiento terapéutico. Mantener una vida con medios artificiales no siempre es moralmente obligatorio. Es destacable, también, la importancia dada a la voluntad del paciente y de sus familiares, como parte de los derechos personalísimos del enfermo. El rechazo de estos medios artificiales no sólo es válido, puede ser recomendable." 
(Como no podían dejar de mencionarlo, agregan: "Valoramos, por otra parte, la prohibición de la eutanasia." Pero bueno, ¿qué se podía esperar?) Sin embargo, leyendo más abajo vemos que nada ha cambiado en la CEA: "Lamentamos, sin embargo, que entre estos medios se haya incluido el posible rechazo de la “hidratación y alimentación”, como si fueran medios desproporcionados, siendo, por el contrario, un acto humanitario que hace a una muerte digna. Su privación, en cambio, sería una eutanasia pasiva." Si la eutanasia fuera legal, no haría falta dejar de comer y beber para poder morir dignamente. Pero claro, lo olvidaba, nuestros cuerpos no son nuestros.

Una herramienta de la que se valen los representantes de la Iglesia Católica cada vez que salen este tipo de leyes que tanto los asustan, es recordar a sus fieles que pueden recurrir a la objeción de conciencia para negarse a participar de estas diabólicas prácticas: casar personas del mismo sexo, realizar abortos, o, en este caso, dejar morir a alguien. Esperemos que no sean muchos los médicos que se nieguen a acatar la ley.
 
Para terminar, el comunicado dice: 
"Hemos creído conveniente expresar nuestro juicio y reflexión con el debido respeto y como un servicio, en orden a colaborar “e iluminar la aplicación de la razón al descubrimiento de principios morales objetivos” (Benedicto XVI, discurso en Westminster Hall, 17/9/2010), que actúan como fuente de toda normativa justa."
Mejor no opino sobre cómo le gusta a Benedicto iluminar y aplicar la razón, ni sobre sus nociones de moral, ¿no?

(El comunicado también se refiere a la ley de identidad de género, pero eso lo dejo para otro post.)

lunes, 14 de mayo de 2012

Algunas reflexiones sobre el aborto


Como esta es la primera vez que escribo sobre el tema, quería aclarar mi posición en cuanto al aborto: creo que se debe respetar el derecho de las mujeres a decidir sobre sus propios cuerpos, sin que nadie les diga lo que deben hacer o no. Después, si queremos disminuir al mínimo los embarazos no deseados (y, de paso, las enfermedades de transmisión sexual), la solución no es que éstos sean ilegales, sino que debería ser prioritario que de una vez por todas haya en todas las escuelas del país -y del mundo- una educación sexual seria, completa y responsable, libre de mitos, culpas y dogmas religiosos. Además, los métodos anticonceptivos deben estar disponibles y accesibles para todas las personas, y la sexualidad y la anticoncepción deben dejar de ser temas tabú, como lo son hoy para tanta gente.

No comparto las distintas posiciones antiabortistas que he visto hasta ahora: no creo que un embrión de unas pocas semanas sea una persona, no creo que tenga derechos, ni que haya que defenderlo de nada por el hecho de que no tenga la culpa de nada (esto puede parecer una obviedad, pero la inocencia de los embriones es un argumento muy usado en contra del aborto). Es decir, no comparto en absoluto que interrumpir un embarazo sea un asesinato. Mucho menos estoy de acuerdo con la muy habitual propuesta de que, ante un embarazo no deseado, se obligue a las madres a completar el embarazo, tener a sus hijos y luego regalarlos.

Ahora, claramente no es lo mismo realizar un aborto en un embarazo de 4 semanas que en uno de 30, así que, sí, debe haber un límite. Pero éste debe ser decidido por médicos y especialistas en el tema, no por filósofos, religiosos ni políticos. Hoy se habla de limitar la posibilidad de abortar hasta las 12 semanas. Esto, claro, a menos que en una etapa más avanzada, los médicos consideren necesario interrumpir el embarazo por algún riesgo para la salud de la madre o algún otro motivo. Sin embargo, es frecuente encontrarse con intentos de sumar gente a la causa antiabortista por medio de publicidades engañosas, como imágenes de madres con grandes panzas, obviamente en estados avanzados de gestación, o de bebés recién paridos y un cartel con alguna frase del estilo de "no me mates".

También se suele discutir mucho sobre las causas ante las cuales cada uno estaría de acuerdo o no con que se realicen los abortos. Personalmente, no creo que los motivos sean asunto de nadie más que la mujer embarazada y, a lo sumo, el padre. Seguramente hay razones con las que estaríamos de acuerdo y otras con las que no, pero eso no es suficiente para decirle a nadie lo que debe o no hacer. Por ejemplo, uno pensaría que pocas personas estarían en contra de que una chica de tan solo 11 años -para colmo violada por un familiar- aborte lo antes posible. Sin embargo, hay gente que lo está, incluso en casos tan aberrantes como este.

Una de las teorías dominantes entre los antiabortistas es que, de legalizarse el aborto, hombres y mujeres dejarían totalmente de lado todos los métodos anticonceptivos, con la tranquilidad de que, ante un embarazo no buscado, podrán deshacerse del indeseado producto sin mayores problemas. De ninguna manera comparto esta visión. Simplemente no creo que nadie desee abortar así porque sí, ni se sienta feliz al hacerlo.

jueves, 10 de mayo de 2012

¿Por qué vemos fantasmas por todos lados?


Logo de los Cazafantasmas
Los fantasmas forman parte de nuestra cultura. Son protagonistas de cientos de películas: desde las de aventuras, como la emblemática Los Cazafantasmas, pasando por las románticas, como Ghost, comedias, como Casper o Beetlejuice, o las de terror, como Poltergeist. Las librerías también están invadidas por ellos: en las novelas de Stephen King, Clive Barker o Henry James, entre muchos otros. Los encontramos también en los cuentos para chicos, en los dibujos animados, series de televisión, etcétera.

No debería sorprendernos, entonces, que los “veamos” en cada rincón oscuro, en las calles en sombras o en casas abandonadas. Es casi habitual que alguien asegure haber visto un espíritu deambulando por un parque o una forma humana flotando en un cementerio, o dando vueltas en una silla de ruedas, como ocurrió hace pocos días en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA), de Rosario.
 
También es frecuente que la gente crea ver formas humanas en partes borrosas de fotos antiguas o en objetos desenfocados en alguna filmación. En estos casos, casi seguro alguien afirmará que es un fantasma: dirán que es un hijo recientemente fallecido (a veces, inluso, a pesar de que haya mejores explicaciones dadas por las personas que tomaron la foto), algún habitante de la casa en la que se tomó la fotografía que murió hace décadas, una persona asesinada que espera justicia, Jesús -nunca falta- o el mismísimo Elvis (esto, claro, en Estados Unidos: en Argentina no somos de ver a Gardel o a Sandro por todos lados, aunque, pensándolo bien, démosle tiempo).
 
Fotografía tomada por empleados del HECA
Las explicaciones posibles son muchas. Nuestro cerebro busca formas reconocibles en lo que vemos y, si no las encuentra, se las asigna él mismo. Este efecto se conoce como pareidolia, y hace que “veamos” formas humanoides, rostros, u objetos conocidos donde en realidad sólo hay formas abstractas. Por ejemplo, cuando vemos luces o sombras que puedan tener formas humanoides. Hay casos en los que, bajo determinadas condiciones, incluso nuestros propios ojos pueden engañarnos. Nuestra mente cansada después de un día largo puede inventar que vimos algo, nuestra memoria puede fallar y nuestra imaginación llenará los huecos.

Otra cuestión a tener en cuenta es la perspectiva, que puede generar ilusiones ópticas y convencernos de que estamos viendo algo que, si pudiéramos observarlo desde un ángulo distinto, quizás veríamos que en realidad no existe.
 
El "fantasma" era un chico en un reflejo
Sin embargo, cuando noticias de este tipo aparecen en los medios, lo más habitual es que se tome la palabra de los “testigos”, sin hacer demasiado análisis ni buscar otras explicaciones. Los periodistas, en muchos de estos casos, no confrontan a los protagonistas de estas historias, ni hacen una investigación detallada de los hechos o las circunstancias en que se dieron. Supongo que esto es porque no se les da mucha importancia, pero sí la suficiente como para difundir la noticia. Las veces en que sale a la luz la verdadera explicación de estos acontecimientos, no se le da a esa noticia la misma importancia que a la anterior. Si era un error, una ilusión o simplemente un engaño, difícilmente nos enteraremos.

miércoles, 9 de mayo de 2012

Que los rayos cósmicos no te impidan volar

Airbus A380 despegando en Londres
Uno de los muchos miedos que deben afrontar las personas que se disponen a viajar en avión es el peligro que entrañan los rayos cósmicos, que provocan serios problemas de salud, como cáncer, a quienes vuelan frecuentemente. Esto, claro, si les creen a los alarmistas de siempre. Veamos un poco de qué se trata esto de los rayos cósmicos.

Los rayos cósmicos (o radiaciones cósmicas) son partículas subatómicas que llegan a la Tierra a través del espacio desde el Sol y las demás estrellas. La mayor parte de las mismas son bloqueadas por la atmósfera, y las que la atraviesan no representan un gran peligro para la vida. ¿Pruebas? Si no fuera así, estaríamos muertos.

Como el “filtro” que detiene estas radiaciones es la atmósfera, en los lugares que se encuentran a mayor altitud, el filtro es más delgado y la exposición es mayor. Algunas de las poblaciones que se encuentran a mayor altura sobre el nivel del mar son:
La atmósfera terrestre (NASA)
Sin embargo, en ninguna de estas ciudades sus habitantes padecen problemas de salud debidos a los rayos cósmicos. En todo caso, es probable que algunos de ellos sufran los efectos de la menor concentración de oxígeno.

En cuanto a los vuelos comerciales, si los rayos cósmicos fueran realmente peligrosos, las personas más afectadas serían, obviamente, los tripulantes de las aeronaves. Sin embargo, no está comprobado que entre las personas con este tipo de trabajos el cáncer sea más frecuente de lo estadísticamente normal. Un vuelo de unas 12 horas puede representar una dosis de unos 0.07 milisieverts, mientras que el límite recomendado por la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) es de 20 milisieverts por año durante 5 años. Como es posible que los pilotos y azafatas excedan los límites recomendados, la FAA puso en Internet una herramienta para calcular el nivel de exposición a los rayos cósmicos en cada vuelo determinado.

Según un informe del Colegio de Obstetras y Ginecólogos de Estados Unidos (ACOG), incluso el vuelo intercontinental más largo no llega a exponer a los pasajeros a más del 15 % del límite recomendado por el Consejo Nacional de Mediciones y ProtecciónRadiológica (NCRP) y la Comisión Internacional de Protección Radiológica (ICRP). Por lo tanto, estas radiaciones no representan un riesgo ni siquiera para mujeres embarazadas.

domingo, 6 de mayo de 2012

Desarmando una batería de 9 voltios

Este post es para los que se preguntaban qué hay adentro de las baterías de 9 voltios, esas rectangulares con los dos contactos arriba. Hoy encontré una que ya estaba vieja y gastada, y estaba a punto de tirarla, cuando recordé que Ezequiel me había mostrado cómo eran por dentro. Me había resultado curioso en su momento, así que decidí abrirla y fotografiar el proceso. 

En primer lugar, abrí la cubierta metálica exterior a lo largo del pliegue lateral longitudinal, que hace las veces de "costura". Aquí es donde descubrimos que estas baterías están compuestas, en realidad, de un grupo de seis pilas alcalinas tipo LR61, de 1.5 V cada una. Estas pilas son unos pocos milímetros más chicas que las AAAA.




Después, saqué la envoltura de plástico, que sostiene a las seis pilas unidas. Desprendí la base de cartón y separé un poco las pilas, para que se vean los contactos. Mientras uno no desarme las pilas individuales, no debería haber ningún riesgo de toxicidad, pero como una o dos de ellas ya estaban empezando a sulfatarse, usé guantes descartables.






Las seis pilas que forman la batería de 9 V.










Por último, separé una de las pilas LR61 para compararla con las AAA y AA.







Si bien este es el tipo de batería de 9 V más común, hay otros modelos (estas fotos son de Wikipedia):




Tipos de baterías de 9 V

De izquierda a derecha: celdas rectangulares de zinz-carbón, celdas rectangulares alcalinas, celdas cilíndricas alcalinas.






Batería de Ni-MH recargable






viernes, 4 de mayo de 2012

En el nombre del Padre (Zeus), el Hijo (Mitra) y el Toro



Mitra matando al toro
Hace poco alguien me contaba que el cristianismo debe su proliferación desde la época del Imperio Romano a la madre del emperador Constantino. Me puse a investigar un poco a ver qué tan cierto podía ser eso, y parece ser que, si bien la afirmación puede ser un poco exagerada, quizás no esté tan lejos de ser cierta.

En aquellos tiempos, el cristianismo competía con otros cultos, denominados paganos. Uno de los más importantes, era el mitraísmo. El culto a Mitra, el dios persa de la luz solar, era una religión mistérica, que son aquellas cuya práctica y ritos de iniciación se mantienen en secreto, sin ser revelados a terceros. Generalmente son practicadas sólo por varones y suelen tener un carácter esotérico.

Excavaciones iniciadas en 1857 bajo la iglesia de San Clemente, en Roma, mostraron que estaba construida sobre una iglesia paleocristiana del siglo IV, y ésta, a su vez, sobre un templo dedicado a Mitra. Por los hallazgos arqueológicos, se sabe que era una religión de origen persa, cuyo origen puede remontarse hasta el Milenio II a.C. Fue introducida en el mundo romano al ser traída por las legiones, primero desde la India y después desde Siria, hacia el año 62 a.C., aproximadamente. Sobrevivió hasta que, junto con todas las religiones paganas, fue declarada ilegal por Teodosio en el 391.

En 1903, el erudito belga Franz Cumont publicó el libro “Los misterios de Mitra”, que llevó a la Escuela de la historia de las religiones a concluir que el mitraísmo había influenciado algunas prácticas del incipiente cristianismo. Con el tiempo, esto provocó que en ambientes más populares que académicos se forme una leyenda urbana muy elaborada sobre un presunto nacimiento virginal de Mitra, así como de su supuesta muerte y resurrección, intentando establecer un paralelismo entre Mitra y Jesús de Nazaret. Esta hipótesis no tiene fundamento histórico, y no se corresponde con los datos que se tienen sobre el Mitraísmo.

Un dato que sí es correcto es que todos los dioses asociados con el Sol, como Mitra, comparten la misma fecha de “cumpleaños”, correspondiente al solsticio de diciembre, erróneamente tomada en aquel entonces como el día 25, ya que en realidad es el 21. En esta fecha se encendían fuegos para celebrar el regreso del Sol (Sol Invictus), porque desde ese momento los días empezaban a alargarse, hecho que se asociaba a un triunfo del Sol sobre las tinieblas. La diferencia es que en el caso de Jesús, esta fecha de cumpleaños se le asignó por motivos políticos: en el siglo IV, 300 años después del comienzo de la Cristiandad, la Iglesia Católica decidió eliminar esta festividad pagana situando en esa fecha la Natividad de Jesucristo, dándole el mismo carácter simbólico (el renacer de la esperanza y la luz en el mundo).

El sacerdote, teólogo católico, filósofo e historiador francés, Alfred Loisy, publicó en 1919 sus estudios sobre el origen del cristianismo en un libro llamado “Los misterios paganos y el misterio cristiano”. En él, Loisy realizó una discusión profunda y minuciosa de los testimonios sobre las religiones de los misterios paganos y su influencia en los orígenes históricos del cristianismo. Según Loisy, el cristianismo, en sus primeras épocas, fue una economía de salvación análoga a los cultos paganos, frente a los cuales rivalizó durante mucho tiempo. Los primeros pensadores cristianos fueron judíos helenizantes que vivían en un mundo pagano, por eso sus primeras teorías tienen una base teórica judía mezclada con algunos rituales propios del paganismo, de forma que el cristianismo resultante es una adaptación de los elementos esenciales de los cultos mistéricos paganos al monoteísmo judío de esos siglos.

El culto a Mitra resultó especialmente atractivo para las tropas romanas, que admiraban sus ceremonias machistas. El triunfo sobre la muerte, así como el autocontrol y resistencia sobre los placeres sensuales, eran especialmente apreciados entre los rangos militares romanos. Se puede especular que este aspecto del mitraísmo dio origen al celibato cristiano.

Algunas de las principales similitudes entre el mitraísmo y el cristianismo:

• El mitraísmo tenía rasgos de profundo simbolismo moral.
• Era un culto totalmente cerrado, una cofradía, como el cristianismo de los primeros siglos, con sus agrupamientos exclusivos y su culto secreto.
• El secreto del mitraísmo no era la fe sino los ritos de sacrificio y mitos de sacrificio, al igual que en cristianismo, con Cristo entregado a la muerte para borrar los pecados de los hombres.
• No se admitían mujeres, que, si bien podían rezar, no podían participar en las funciones del culto.
• Los reyes honraban a Mitra, lo tomaban como testimonio de sus juramentos (tal como se hace hasta hoy con los juramentos “en nombre de Dios”, o sobre la Biblia o los Evangelios) y lo invocaban en los combates (esto en realidad es común a todas las religiones, ya que en todas las guerras uno o ambos bandos piden a su dios que los ayude a ganar).
• La Trinidad cristiana (a diferencia del dios único del judaísmo) -Padre, Hijo y Espíritu Santo- se asemeja a la trinidad del mitraísmo: el Padre (Zeus-Ormazd), Mitra y el toro.
•El dios Zeus griego, que es el Ormazd persa, era el dios Padre supremo, pero Mitra era el verdadero objeto de la religión. El grado supremo del dios era el de Padre, cuya dignidad correspondía a la de Mitra en el Cielo, de forma similar a Jesús y su Padre, Dios.
• Al igual que sucede en las descripciones habituales de Jesús, el joven dios Mitra era hermoso, valiente, puro y enseñaba una moral austera que él mismo practicaba.
• Al igual que el salvador cristiano, Mitra era un dios salvador y sufriente.
• El mito del sacrificio del toro (sacrificio simbólico durante el rito) a manos de Mitra tenía como finalidad la redención e inmortalidad de los adeptos. Sobre el sacrificio del toro (representando a Mitra) reposaba el equilibrio del mundo y la salvación de los hombres.
• El banquete ritual de los fieles de Mitra tenía similitudes con la eucaristía cristiana:
Fracción del pan (G. Sfasie)

  • Es probable que a veces se sacrificaran toros reales, pero no se comía su carne.
  • La bebida sagrada (según algunos era agua y según otros era vino), que representaba la sangre del toro, era la sustancia del toro místico y divino que era Mitra. Se consumía (simbolizada en la bebida sagrada) junto con la ofrenda del pan durante la cena o eucaristía mítrica.
  • La sustancia del toro divino estaba en el pan de la cena de los iniciados, tal como estará la sustancia de Cristo en el alimento de los bienaventurados.
  • Luego de la celebración de la oblación del pan aparecía una imagen de la resurrección de Mitra.
  • La intención del rito era la misma: el Soldado se consagraba a Mitra, como el cristiano a Cristo.
• El culto de Mitra conocía la semana con consagración de los siete días a las siete divinidades planetarias, pero, a diferencia del judaísmo (y al igual que el cristianismo), santificaba el día del Sol, el domingo, y no el sábado.
• El sacerdote era un iniciado del grado superior, un Padre, que llevaba un gorro frigio, una vara y un anillo, muy similares a la mitra, el báculo y el anillo de los obispos cristianos (sí, el “sombrero” de los obispos también se llama mitra).
• Mitra también bautizaba a sus creyentes y prometía la expiación de los pecados por el efecto del baño. Sólo en este culto se unía al bautismo la imposición de un signo en la frente, como en la Iglesia cristiana.

Hacia el año 274, el mitraísmo se había fusionado por sincretismo con otros cultos solares orientales, originando una religión nueva, el Sol Invictus. El emperador Aureliano decidió entonces establecer este nuevo culto como religión oficial en el Imperio, en honor al cual erigió un gran templo y creó un cuerpo estatal de sacerdotes para rendirle culto, cuyo máximo dirigente llevaba el título de pontifex solis invicti. Desde ese momento, a pesar de seguir existiendo como culto no oficial y ser profesado incluso por muchos de los senadores romanos, el mitraísmo original se encontraba ya en decadencia. Una de las causas era la pérdida de territorios fronterizos, donde el mitraísmo estaba más arraigado, a manos de invasiones bárbaras. La otra gran causa, quizás la principal, fue el apoyo de Constantino al cristianismo, influenciado probablemente por su madre, Helena, que provenía de una familia cristiana.

Constantino y Helena

Constantino dio un gran poder a los cristianos, una buena posición social y económica a su organización, concedió privilegios e hizo importantes donaciones a la Iglesia, apoyando la construcción de templos y dando preferencia a los cristianos como colaboradores personales.

Con el Edicto de Milán, Constantino legalizó la religión cristiana en 313 y, a partir de ése año, se llevan a cabo una serie de acciones para favorecerla:

· En el 314, en el Concilio de Ancyra, se denuncia el culto a la diosa Artemisa.
· Entre el año 315 y el siglo VI muchos templos paganos fueron destruidos por los cristianos y sus sacerdotes fueron asesinados, al igual que miles de creyentes. También se prohibió la construcción de nuevas estatuas de los dioses paganos y que se rinda culto a las existentes.
· En 325 Constantino ordena el primer Concilio de Nicea con el propósito de construir la unidad de la Iglesia cristiana. Después de dos meses de debate religioso, Constantino inclinó finalmente la balanza a favor de los que proclamaban a Jesús como único Dios.
· Constantino ordenó la destrucción de todas las imágenes de los dioses y la confiscación de los bienes de los templos. Muchos de esos tesoros y estatuas fueron usados para decorar su Nova Roma (Constantinopla), su nueva capital del Imperio romano.
· En el 391, el mitraísmo quedó formalmente prohibido.

Es así que durante el siglo IV el cristianismo desplazó a todos los demás cultos hasta convertirse en la única religión oficial del Imperio con Teodosio. Tanto Juliano como Eugenio hicieron algunos intentos de revitalizar el culto de Mitra, pero sin demasiado éxito.

¿Cómo habría sido la historia, si Constantino hubiera decidido apoyar al mitraísmo en lugar del cristianismo?

jueves, 3 de mayo de 2012

Si tu médico te recomienda usar homeopatía, lo mejor para tu salud sería que cambies de médico


Todo dicho, ¿no?
Claudio María Domínguez (a quien ya le dedicaremos algún post) publica en su blog en Infobae un artículo del Doctor Ignacio Torres, en el cual contesta a la nota escrita por Roxana Kreimer para Clarín a raíz de la Semana Mundial de la Homeopatía y su contraparte, el Suicidio Homeopático. Torres dice que 
"[...] el punto central de discusión es que aún no se ha podido explicar como es que funcionan los medicamentos homeopáticos, y no así como sostiene la licenciada en filosofía y doctora en ciencias sociales Roxana Kreimer en su nota publicada en el Clarín, que los medicamentos homeopáticos no tienen ninguna acción y son placebo." 
Según parece, para Torres es importante destacar que Kreimer no es doctora, como él. Veamos entonces las credenciales del doctor Torres, visitando su página web.

La pantalla de inicio nos recibe con imágenes de perritos, pastitos, paisajes que parecen wallpapers de Windows, y un mortero con alguna sustancia machacada, que van rotando y que tienen algunas leyendas explicativas debajo. Al lado de las imágenes, el buen doctor nos mira tranquilizadoramente, como diciendo "Entrá. Está todo bien." Al pie de la pantalla, el logo de la Liga Medicorum Homeopathica Internationalis.

Según su C.V., Torres se recibió de médico en la UBA e hizo la residencia en el Hospital Universitario CEMIC. Luego hizo un viaje a Vancouver, donde participó en la atención y tratamiento de pacientes en un centro de atención integrativa (palabra que hoy está muy de moda y que quiere decir “no preguntes lo que es, nada más creenos que te hace bien”) llamado Tzu-chi. La fundación Tzu-chi (literalmente, alivio, compasión) fue creada en Taiwán en 1966 por una maestra budista llamada Cheng Yen, impulsora del llamado budismo humanista. Esta fundación se sustenta principalmente con donaciones y el trabajo de voluntarios. Hoy tiene alrededor de 10 millones de miembros y sucursales en varios países. Sus actividades principales se relacionan con la caridad, la medicina, la cultura, la educación y la cultura humanista, tanto en países pobres como en zonas afectadas por desastres.

En ese instituto, Torres se encontró con homeópatas, acupuntores, osteópatas y médicos naturistas, experiencia que, según cuenta, lo convenció de que “las herramientas de las que disponía eran insuficientes para abordar y ayudar a solucionar la mayoría de las problemáticas de los pacientes que me consultaban. Eso me llevó a estudiar homeopatía y luego naturismo y medicina biológica para poder brindarle a cada paciente una medicina que lograse integrar la sabiduría de la medicina antigua junto con los últimos avances tecnológicos y conocimientos de la medicina moderna.” O sea...
Efectividad, by La Pulga Snob
Actualmente, el Dr. Torres practica la homeopatía y también la enseña como ayudante docente de la Asociación Médica Homeopática Argentina, como docente en la Escuela Superior de Medicina Osteopática Fulcrum y como miembro de la Asociación de Oncología Integrativa (otra vez esa palabra). Dice utilizar en su práctica la homeopatía unicista, el naturismo y la fitoterapia, pero también -sigue- “los últimos conocimientos de la medicina convencional para cuidar y ayudar a restablecer la salud de mis pacientes”.

Junto con su Curriculum, agrega la siguiente frase: 
“Creo que la formación del médico de hoy ha perdido los conocimientos fundamentales para cuidar al ser humano, conoce cómo funciona hasta el mínimo detalle sus células, pero ha olvidado y desconoce cuáles son las leyes fundamentales de su propia naturaleza”. 
Analicemos un poco: un médico recién graduado, que está terminando la residencia, se va a hacer un voluntariado en una clínica budista en Canadá, y cuando vuelve asegura conocer las leyes fundamentales de la naturaleza del ser humano, que la medicina de hoy ha perdido, y que en esta escuela-templo le enseñaron en unos pocos meses (o lo que sea que haya durado su estadía). La verdad, no me inspira mucha confianza. Un médico que crea en este tipo de charlatanerías me deja la duda de si realmente las cree y es, por lo tanto, un ignorante, o si sabe que no funcionan y es, entonces, un timador más que se abusa de la confianza de sus pacientes para venderles frasquitos con agua y pastillitas con azúcar. No conozco al Dr. Torres, así que no puedo saber la respuesta, pero sea cual sea, somos nosotros los que debemos informarnos sobre todas las charlatanerías que andan dando vueltas para no ser víctimas de sus engaños.

Una de las pestañas de su página web se titula: “La homeopatía - Un sistema médico terapéutico diferente y superador.” Entremos a ver qué dice.
Estampilla conmemorativa
“La homeopatía es un sistema terapéutico basado en el principio de semejanza enunciado por Hipócrates, ¨Similia Similibus Curentur¨ y en la administración de pequeñas dosis (infinitesimales) de una sustancia.”
Para empezar, el principio enunciado (similia similibus curentur) fue formulado por Hahnemann, no por Hipócrates. Por otro lado, las dosis en la homeopatía no son ni pequeñas ni infinitesimales, son inexistentes.
“La alopatía, es decir, la medicina convencional o tradicional es un sistema terapéutico basado en el principio “Contraria contrariis curantur”, es decir administrar sustancias que generan el efecto opuesto a los síntomas del cuerpo. El principio Aequalia aequalibus curantur es en el que se fundamenta el uso de vacunas.”
Aparentemente, no aprendió mucho en la Facultad de Medicina. La alopatía no es equivalente a la medicina. La intención del término alopatía, desde su primer uso por Hahnemann, es distinguir a la homeopatía como práctica y denigrar a la medicina. Nada más falso. La medicina cura con lo que sirva para curar. En algunos casos se usan pequeñas dosis de sustancias que causen los mismos síntomas observados en lso pacientes, con el objetivo de que el sistema inmunológico de nuestro organismo adquiera defensas contra los patógenos que los originaron, es decir, son remedios preventivos (ejemplo, las vacunas). En otros casos, se usan sustancias que contrarrestan los síntomas (ejemplo, los analgésicos). En otros casos, ninguna de las dos cosas (un dolor de muelas, por ejemplo, no se cura con homeopatía ni con alopatía, sino sacando la muela).
“La homeopatía es una rama de las Ciencias Médicas…”, etc. 
Un sector del Muro de Berlín, 1986 (T. Noir)
La homeopatía no es una rama de las ciencias médicas. Ni lo es, ni lo fue, ni pretende serlo. Es pura pseudociencia. Si alguien cree que la homeopatía funciona y quiere ser coherente con dicha aseveración, debe, por ende, creer que el remedio efectivo contra la sensación de ahogo es el preparado homeopático hecho en base a pequeños pedacitos del Muro de Berlín disueltos y diluidos hasta la inexistencia. Sí, Muro de Berlín diluido para curar la sensación de ahogo. Eso es homeopatía. O caca de perro diluida hasta el infinito para combatir la diarrea. De forma similar, existen preparados homeopáticos basados en diluciones de fragmentos de la Gran Muralla China, o frasquitos con diluciones de "emanaciones" de Stonehenge. Ni hablar del remedio contra la tos persistente y otros males: una supuesta dilución de trinitrotolueno (para más detalles: TNT). 

Sinceramente, no puedo creer que un médico crea en serio estas cosas. En este caso, resulta mucho más creible y confiable la opinión de una licenciada en filosofía y doctora en ciencias sociales, que la del Dr. Torres.

En próximas entradas, más sobre este tema.